Al hablar sobre economía doméstica con personas que están en "zona roja", frecuentemente sale a relucir el típico comentario: "A ver si estas Navidades me toca el gordo". El gordo ya te ha tocada porqué has nacido en una sociedad que pone a tu disposición un conjunto de reglas que te permite acceder a la abundancia. Otra cosa es que no te hayas tomado la molestia de averiguar cómo funciona el tablero en el que se desarrolla la partida... La mayoría de personas ha manejado mucho dinero a lo largo de su vida, y con que hubieran sabido aprovechar ese potencial, ahora podrían tener una situación completamente distinta. Renunciar a un mísero 10% de lo que uno maneja, aunque a algunos presupuestos ajustados les pudiera paracer mucho, en realidad está al alcance de casi cualquiera que se empeñe. Y con un 10% trabajando para nosotros tenemos el potencial de cambiar las reglas del juego. vC
Al hablar sobre economía doméstica con personas que están en "zona roja", frecuentemente sale a relucir el típico comentario: "A ver si estas Navidades me toca el gordo".
ResponderEliminarEl gordo ya te ha tocada porqué has nacido en una sociedad que pone a tu disposición un conjunto de reglas que te permite acceder a la abundancia.
Otra cosa es que no te hayas tomado la molestia de averiguar cómo funciona el tablero en el que se desarrolla la partida...
La mayoría de personas ha manejado mucho dinero a lo largo de su vida, y con que hubieran sabido aprovechar ese potencial, ahora podrían tener una situación completamente distinta.
Renunciar a un mísero 10% de lo que uno maneja, aunque a algunos presupuestos ajustados les pudiera paracer mucho, en realidad está al alcance de casi cualquiera que se empeñe. Y con un 10% trabajando para nosotros tenemos el potencial de cambiar las reglas del juego.
vC
En una ocasión lo calculé...un pastón!
ResponderEliminarSi todo el mundo apartara un 10% de lo que gana, no haría falta un sistema de pensiones
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